El diagnóstico de los problemas de memoria puede ser desconcertante. En los adultos mayores, es fácil confundir estos problemas con la pérdida de memoria cotidiana que algunas personas tienen a medida que envejecen.
Sin embargo, los problemas de memoria pueden ser un signo de un diagnóstico más grave, como la enfermedad de Alzheimer o la demencia.
Consulte con un proveedor de atención médica si a su ser querido le pasa algo de lo siguiente:
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No es capaz de recordar datos o personas conocidas
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Está cada vez más olvidadizo o tiene dificultad para recordar eventos recientes
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Tiene dificultad para hacer actividades cotidianas, como cocinar
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Se desorienta al conducir o caminar en lugares que antes le eran muy familiares
El proveedor de atención médica de su ser querido le hará una exploración física completa. Le preguntará sobre el uso de medicamentos con receta y de venta libre. El proveedor de atención médica también le hará preguntas sobre la dieta, la historia clínica y la salud general de la persona. Si es necesario, se hará una prueba de diagnóstico por imágenes del cerebro. Un problema de memoria puede deberse a lo siguiente:
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Reacción a los medicamentos
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Depresión
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Problema de la tiroides
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Deshidratación
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Deficiencia vitamínica
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Infección
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Ataque cerebral
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Trastornos metabólicos
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Demencia
Si cuida a alguien con problemas de memoria, estos consejos pueden resultarle útiles. Es posible que pueda ayudar a la persona a mantener la confianza, la independencia y la dignidad durante el mayor tiempo posible.
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Sea flexible y paciente. Ayude a la persona a intentar recordar lo que pueda.
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Haga que a la persona le resulte más fácil recordar información nueva. Por ejemplo, hable de la información nueva de manera simple y repítala con frecuencia. Divida las actividades nuevas en pasos pequeños.
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Dé señales verbales en lugar de hacer preguntas. Por ejemplo, diga: "Ella es Jane, tu prima, que vino a verte". No diga: "Ella es Jane. ¿Recuerdas quién es?".
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Siga siempre la misma rutina. Esto ayudará a que la persona se sienta más segura y le resultará más fácil recordar lo que suele suceder durante el día. Demasiada variedad y estimulación pueden resultar confusas.
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Anote la información importante.
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Sepa qué esperar. Por ejemplo, puede ser más fácil controlar los enojos si comprende que su ser querido no recuerda cómo se descarga el lavavajillas debido a la enfermedad. No es porque no quiera ayudar.
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Busque ayuda de familiares y amigos.